sábado, 30 de julio de 2016

¡NO A LA DEMAGOGIA DEL PLEBISCITO!

¡NO A LA DEMAGOGIA DEL PLEBISCITO!

Popayán, julio 30 de 2016

Si en Colombia existiera un verdadero movimiento democrático se podría impulsar una campaña más radical y fuerte que podría decir:

¡No a la demagogia del plebiscito!

Ya en mayo de 2014 se derrotó a Uribe y se le ordenó a Santos y a las FARC que acordaran la terminación del conflicto armado.

¿Para qué van a gastar recursos económicos que hacen falta para la nutrición, la salud, la educación, etc.?

&&&&&&&&

Lo que ocurre es con el cuento de la "paz" y el "plebiscito", la gran burguesía colombiana y el imperio global necesitan distraer y engatusar a la población. En realidad es un simple "juego", un embuste, un artificio, una trampa, sobre todo ideológica. Es un distractor perfecto.

A la Gran Burguesía le interesa –ante todo–, que la gente menos dormida y más dispuesta a "despertar", o sea, más o menos el 15% de la población (entre ellos la "izquierda" y los "progresistas"), se entretenga con ese "señuelo" mientras ellos pueden resolver, atenuar u ocultar temporalmente sus graves problemas económicos, que son:

  • Bajísima rentabilidad del capital
  • Enorme y creciente deuda pública
  • Inmanejable déficit fiscal
  • Nula inversión interna y externa
  • Desequilibrio total en la balanza de pagos (caída de las exportaciones y disparada de importaciones caras por la devaluación de la moneda - dólar caro)
  • Crisis en bancos y entidades financieras con amenaza de quiebras que ha empezado por cooperativas que manejan cartera de libranzas 
  • Consumo a la baja y gente con deudas impagas
  • Inflación hacia arriba y carestía
  • Desempleo en ascenso
  • Necesidad urgente de una nueva Reforma Tributaria (nuevos impuestos a la población, especialmente a los profesionales y clases medias con aumento del IVA y fuertes gravámenes a las rentas de trabajo). Se darán las formas de rebajarle impuestos al gran capital.
  • En general, les urge crear condiciones para una mayor entrega de nuestras riquezas al gran capital, ahora ya no sólo en el campo de la extracción de recursos naturales (petróleo, oro, carbón) sino en la "Nueva Economía" (industria, agricultura, turismo y comercio).
Y entonces, tratan de convencer a la gente de que esté dispuesta a hacer más sacrificios, a no ser intolerantes ni conflictivos, a construir la paz y la convivencia en beneficio de la “patria”.

Uribe, en ese sentido, sólo es otra marioneta –con apariencia de ser disfuncional–, para hacer más creíble el sainete.

Y Santos le va a pedir al nuevo Fiscal General una "fuerte campaña contra la corrupción"...

¡Qué tal!

lunes, 25 de julio de 2016

EL PUEBLO ESTÁ DESPERTANDO

EL PUEBLO ESTÁ DESPERTANDO

Popayán, 25 de julio de 2016

No es verdad que la gente pare de perseguir sus sueños porque sean mayores, se hacen mayores porque dejan de perseguir sus sueños.”

Gabriel García Márquez.
El pueblo está despertando y lo hará poco a poco
Empieza a ver lo que no podía ver antes, porque...
El conflicto armado era un velo que no lo dejaba ver
O si veía, no se podía expresar abiertamente.

El pueblo está despertando y lo hará poco a poco
Lo que estaba oculto o minimizado, está saliendo a flote
La corrupción, el desempleo, la desigualdad...
La injusticia, la iniquidad, la pobreza y un largo etcétera.

El pueblo está despertando y lo hará poco a poco
Aquellos a los que no les conviene que el pueblo despierte
Construyen nuevos velos para seguir engañando
La "paz que será el paraíso" o el "miedo al pasado" (que es el infierno).

El pueblo está despertando y lo hará poco a poco
Los artistas, escritores y deportistas llevan la delantera
Shakira dijo que "no habrá paz en un país con niños hambrientos"
Winner Anacona y Catherine Ibargüen le hicieron el feo al gobierno

El pueblo está despertando y lo hará poco a poco
En los últimos años hemos sido testigos de continuas protestas y paros de...
Indígenas, campesinos, trabajadores, camioneros, mineros y maestros
Profesionales precariados y pequeños empresarios quebrados.

El pueblo está despertando y lo hará poco a poco
Pero quienes tienen que ayudar a quitar el velo
Y reaccionar a la nueva situación para avanzar... miran atrás,
Están engolosinados con el velo de la "paz" y de la "guerra".

El pueblo está despertando y lo hará poco a poco
Sólo quienes se conecten con la nueva situación
Podrán entender que detrás del escepticismo y la indiferencia
Existe una enorme rabia contenida que espera "explotar".

El pueblo está despertando y lo hará poco a poco
Sólo quienes comprendan los nuevos momentos podrán...
Transformar la "semi-instintiva" y "semi-inconsciente" indiferencia
En una avalancha consciente de acción transformadora.

El pueblo está despertando y lo hará poco a poco
Es urgente unir a quienes avizoran el futuro con nuevas miradas
Para construir un camino sin velos... con sueños y certezas
Arañando el cielo y arando la tierra.

&&&&&

Nota: En el caso de las elecciones de los EE.UU., el candidato “republicano” Donald Trump desnuda la "realidad psíquica" de millones de trabajadores blancos y de algunos ricos (incluso de muchos hispanos y negros), a los que el "sueño americano" hace rato se les fue al piso. Están frustrados y no tienen otra forma más que expresarlo apoyando a este "pequeño Hitler" que es –en últimas– un estereotipado vendedor de ilusiones. Incluso el hecho de que sea un empresario de apuestas, un jugador, un multimillonario que ha vivido del espectáculo y el entretenimiento, los hace creer –o por lo menos "dudar" o imaginar–, que de pronto el tipo tiene, como un mago, un "as debajo de la manga".

Pero además, como Trump es multi-millonario, el apoyo de toda esa gente inconforme y frustrada es, a la vez, un castigo para toda la clase política –incluyendo republicanos y demócratas–, a los que la gente identifica como "pobretones que se han enriquecido a punta de lobby y corrupción". Es una situación interesante en donde "lo desconocido” pero rebelde e irreverente, así pueda ser "malo", es mucho mejor que "lo malo conocido". Es como un salto al vacío. El concepto de "sinthome" de Lacan, da muchas pistas sobre ese fenómeno.


Y en Colombia lo que llamo "semi-instintiva" y "semi-inconsciente" indiferencia de las mayorías del pueblo por el "proceso de paz", podría ser un fenómeno parecido –un rechazo a todos (Santos, Uribe, FARC)–, pero aquí no ha surgido quien o quienes canalicen ese "sentimiento". Vamos a ver si los jóvenes deciden impulsar ese "movimiento", que no sea protagonizado por ningún “político” porque pienso que es bueno que nadie (en particular) lo encarne y que sea en las elecciones de 2018 en donde esa "indiferencia" salga a relucir.

miércoles, 20 de julio de 2016

MADURO ESTÁ DESNUDO

MADURO ESTÁ DESNUDO

Popayán, julio 20 de 2016

Son múltiples las señales de que el gobierno de Nicolás Maduro vive sus últimos estertores. La avalancha de venezolanos hacia Colombia en busca de artículos de primera necesidad es algo similar a la huida de alemanes hacia Occidente en 1989. Que los habitantes del país más rico en petróleo del continente sufra esa especie de humillación es de un impacto psicológico enorme. La moral del bravo pueblo venezolano está golpeada. Y en medio del duelo y la rabia se busca al culpable. Ahí, el Presiente Maduro queda en la mira. “El rey está desnudo”.

Pero además, que la principal cabeza del “chavismo duro” afirme que si la oposición se apodera del gobierno “¡Nos alzaremos!”, es casi un reconocimiento de que la batalla en el terreno electoral está perdida. Que lo diga la principal figura política que está detrás del Presidente, quien es cabeza de la bancada parlamentaria y el hombre fuerte de la cúpula chavista en el ejército, es sintomático. Muchos analistas lo ven como una “bravata”, “una amenaza”, un gesto populista para la tribuna. Pero no, hay allí algo mucho más diciente.

Diosdado Cabello se está hablando así mismo. Se está dando ánimos. Está tomando una decisión pública. Ve cómo el poder se le va de las manos y dice que no está dispuesto a entregarlo “por las buenas”. Cree con convicción que todo lo que ocurre es fruto de la confabulación imperial y de la oligarquía, y que el gobierno chavista no tiene ninguna responsabilidad. Y observa que el piso se le está moviendo. Decirlo públicamente es una forma de afirmarse.

Pero también es un mensaje para los sectores “chavistas” más fieles, decididos y apasionados. Para los que van a perder mucho. Para los que están convencidos de su misión y están dispuestos a morir por ella. Para los que han acumulado poder y riqueza a la sombra de la “revolución”. Para los que puedan estar comprometidos en delitos. Para los que han conseguido privilegios. Para quienes el “proceso” les ha significado un cambio sustancial en sus vidas. En fin, para sus propios partidarios.

Sin embargo, el hecho de que lo diga en voz alta, significa que es, a la vez, una carta de negociación. Ahora que el gobierno busca –con algo de desesperación– el diálogo con la oposición, es una forma de decir: “¡Tómenos en serio!”, “¡No nos acorralen!”. Ahora que el referendo revocatorio está a punto de activarse y que empiezan a expresarse críticas internas dentro de las mismas fuerzas chavistas, la forma “normal” de buscar una salida negociada es con este tipo de actitudes amenazantes.

Algunos estudiosos de la realidad venezolana y de la evolución del proyecto revolucionario que lideró el comandante Chávez anuncian un “auto-golpe” del ejército. No se prevé ese escenario. El ejército de alguna manera gobierna a nivel central y lo hace en muchas gobernaciones. Ellos saben lo deteriorada que está la situación. No parece que quieran echarse encima la responsabilidad de enfrentar un alzamiento popular. Saben que si se presenta, ya no será una simple “guarimba de derecha”. Y no quieren traicionar el legado de Bolívar y de Chávez: “Maldito el soldado que apunta su arma contra su pueblo”.

Por ello la frase de Diosdado Cabello de que “nos alzaremos” es un mensaje para sí mismo, llenarse de valor y trasmitir ese espíritu a sus seguidores. Es un intento de evitar la desbandada dentro de sus propias filas. Pero a la vez, es una señal de que el “chavismo” no está dispuesto a sufrir una derrota política catastrófica en el referendo revocatorio y que la salida política concertada con la oposición ya está en camino. Y Maduro, en la mira.

Pero sólo será una tregua hasta 2018. Hay que ver quien la aprovecha mejor.


E-mail: ferdorado@gmail.com / Twitter: @ferdorado  

martes, 19 de julio de 2016

CONSTRUIR UNA ALTERNATIVA CIUDADANA PARA LA PAZ

Propuesta de línea estratégica para los trabajadores colombianos en esta fase de la lucha (síntesis)

CONSTRUIR UNA ALTERNATIVA CIUDADANA PARA LA PAZ

Popayán, 22 de julio de 2016
El presente escrito es una síntesis de una propuesta que se viene trabajando con diversos colectivos de jóvenes trabajadores que desean construir una alternativa viable, cierta y positiva frente al nuevo momento que avizoran los colombianos con ocasión de la terminación negociada del conflicto armado. Su desarrollo hará parte de un documento que sustente con cifras y argumentos lo planteado.  
1. Desarrollar unidad de acción con el sector de la Burguesía Emergente que denominamos "decente", porque está dispuesta a impulsar una lucha decidida y sostenida contra la corrupción político-administrativa en todos los niveles del Estado.  

Esa burguesía emergente ha surgido en los últimos 30 años por efectos de la acumulación de capital por parte de pequeños y medianos productores del campo y de la ciudad en diversos rubros de la economía agraria, industria, comercio, servicios, transporte y muchos otros.

Es "decente" no porque sea portadora de algún principio ético o moral de tipo especial sino porque –al igual que la mayoría de la población–, está cansada de pagar impuestos que los corruptos incrustados en el Estado se los roban impunemente.

Esa burguesía "decente" está hoy representada principalmente por Sergio Fajardo y Claudia López, quienes recogen –en gran medida– las ideas del asesinado dirigente Luis Carlos Galán Sarmiento, que representaba los intereses de la vieja y débil burguesía industrial que apareció en la primera mitad del siglo XX.

2. Derrotar plena y totalmente a la Burguesía Burocrática que es el núcleo de la corruptela que se ha apoderado del Estado y es el principal objetivo o "blanco", en esta fase de la lucha.

Esa burguesía burocrática está hoy representada por César Gaviria, Ernesto Samper, Horacio Serpa, Roy Barreras, Armando Benedetti y toda la "patota" corrupta empotrada en el Estado, en todos los partidos políticos tradicionales y en algunos sectores de "izquierda".

3. Ganarnos para esa "alianza táctica" al ala izquierda de la Burguesía Agraria hoy representada por Jorge E. Robledo.

4. Convencer y atraer a esa unión a las clases medias progresistas representadas hoy principalmente por Gustavo Petro.

5. Atraer con inteligencia o neutralizar a las bases sociales del resto la Burguesía Agraria que tienen influencias históricas de los grandes terratenientes reaccionarios y clericales. Esa burguesía agraria con clara influencia conservadora está hoy representada por Álvaro Uribe Vélez y Alejandro Ordoñez, a quienes hay que aislar y derrotar en esta lucha.

6. Atraer a los trabajadores del Estado y a sectores campesinos, indígenas y afrodescendientes influenciados o cercanos a la Burguesía Burocrática. 

7. Derrotar parcialmente (porque todavía no tenemos la suficiente fuerza para hacerlo totalmente) a la Burguesía Transnacional que utiliza a la burguesía burocrática para engañar al pueblo con apariencias de reformas, ilusiones de "paz" y falsas aperturas democráticas, mientras ellos en alianza con los Imperios nos imponen sus políticas neoliberales y capitalistas. Esa burguesía transnacional hoy está representada por J. M. Santos.

8. Aislar y/o neutralizar a otros sectores de la Burguesía Emergente que ha tenido su origen en economías ilegales (narcotráfico, minería ilegal, contrabando, tráfico de armas y personas, juegos de azar, etc.), cuyos representantes políticos se caracterizan por permear e infiltrar a todos los partidos políticos y a organizaciones y gremios sociales, y en otros países vecinos han hecho un enorme daño a los "procesos de cambio progresistas".

Creemos que si aplicamos una estrategia de este tipo podemos desarrollar un poderoso movimiento ciudadano y popular que aproveche en forma unificada y potente la campaña por el SI en el Plebiscito para refrendar la terminación negociada del conflicto armado con las FARC y quedar listos o fortalecidos para derrotar a las castas dominantes corruptas en las elecciones de 2018.   

Los puntos del programa mínimo que puede unir a los trabajadores colombianos con esos sectores y fracciones de clase son básicamente los siguientes: lucha "con dientes" contra la corrupción, defensa integral del medio ambiente (bosques-agua) y cambios sustanciales en el modelo productivo para generar empleo digno y formal.

Si ese movimiento ciudadano y popular se conforma en los próximos meses, es posible acordar un programa para aplicar y ejecutar en uno o dos gobiernos de transición a partir de 2018, que recoja los intereses de las diversas clases y sectores de clase aglutinadas en ese movimiento, que planee, diseñe y desarrolle el Nuevo Modelo Económico que Colombia necesita para poder construir la verdadera paz.

Ese nuevo modelo económico tiene ya construidas algunas bases materiales en lo económico y social que demandan el apoyo del Estado pero ante todo se requiere un nuevo paradigma teórico que impulse la constitución de nuevas formas de asociación de los productores (“pro-comunes colaborativos”), la combinación de nuevas tecnologías de la información con nuevos sistemas de energía, y un nuevo tipo de relacionamiento con la economía global.


E-mail: ferdorado@gmail.com / Twitter: @ferdorado      

lunes, 18 de julio de 2016

LA “OTRA CAMPAÑA” EN EL PLEBISCITO

LA “OTRA CAMPAÑA” EN EL PLEBISCITO

Popayán, 18 de julio de 2016

Todo es posible si lo imaginas

La propuesta - práctica y concreta - es que el primer paso para consolidar los acuerdos de terminación del conflicto armado y ampliar la democracia es "derrotar a los corruptos político-administrativos", sacarlos del gobierno y del Estado, y organizar a la población para irles cerrando todos los espacios posibles.

Sólo es el primer paso pero si lo damos bien, seguro que avanzaremos en la construcción de un país diferente. Si no se da ese paso, todo lo acordado en La Habana quedará en el papel como ocurrió con la Constitución de 1991.

Ligar o conectar el voto por el SI en el plebiscito (si se convoca) con la campaña contra los corruptos es fundamental para no dejar que todo este proceso se convierta en una farsa.

Para hacerlo, lo ideal, es organizar "La Otra Campaña", convocando a partidos políticos, a organizaciones sociales, personalidades y ciudadanos en general que estén dispuestos a conformar un gran movimiento ciudadano y popular deslindado totalmente de Santos, Uribe y las FARC.

Todo lo anterior con nuestras propias consignas, símbolos, mensajes y actos de campaña por aparte de los que realice el gobierno.


Tenemos poco tiempo para organizar la "Otra Campaña" pero lo podemos hacer.

sábado, 16 de julio de 2016

ES URGENTE ORGANIZAR UN MOVIMIENTO CIUDADANO DE NUEVO TIPO

ES URGENTE ORGANIZAR UN MOVIMIENTO CIUDADANO DE NUEVO TIPO

Popayán, 16 de julio de 2016

Insistiendo sin desistir...

Si en 2018 elegimos a un mandadero o continuador de Uribe o de Santos, tendremos más de lo mismo: corrupción; carestía; mafias bancarias y políticas; destrucción de páramos, bosques y ríos; más privatizaciones; y necesariamente, más paros y bloqueos de carreteras por parte de camioneros, campesinos, indígenas, maestros, trabajadores, pequeños mineros, vendedores ambulantes, taxistas, desempleados, desplazados y, tal vez, muy seguramente, desmovilizados de las FARC.

Y por lo tanto, no habrá ninguna "paz".

Y entonces... ¿nos seguiremos quejando? Desde ya hay que organizar otra cosa... un "movimiento ciudadano de nuevo tipo".

Si Santos protagoniza el SI en el plebiscito y "gana", con César Gaviria a la cabeza, van a querer ungir a su continuador-mandadero.

Si Uribe protagoniza el NO y/o la abstención, va a querer investir a su propio continuador-mandadero.

Y de acuerdo al umbral aprobado para el plebiscito, ambos van a ganar: Santos porque obtendrá lo mínimo y Uribe porque la abstención será mayoritaria (siempre lo es).

Por ello, para afrontar la decisión más importante de nuestros últimos 60 años, hay que organizar algo diferente. Y es urgente hacerlo.

Sólo si un "movimiento ciudadano" deslindado de Santos y de las FARC impulsa el SI en el plebiscito (si se convoca), colocándole unos "significantes" que nos diferencien de la "pura y simple paz", podremos evitar que la polarización entre Santos-Uribe, sea la constante en 2018.

Los significantes en los que insisto son: No más corrupción, no más destrucción de nuestro medio ambiente, y generación de empleo digno y formal.


Claro, cada cual podrá colocar el que quiera.

viernes, 15 de julio de 2016

EL RANCHO ARDIENDO Y LA TORMENTA PERFECTA

EL RANCHO ARDIENDO Y LA TORMENTA PERFECTA

Popayán, 15 de junio de 2016

Lo que ocurre con los "camioneros"[1] es –en últimas–, resultado de una crisis del modelo productivo de Colombia y reflejo de la crisis global del capitalismo.

La "burguesía emergente" no tiene en que invertir sus recursos, los intereses bancarios no son atractivos, la inversión en producción agropecuaria no es rentable, no hay desarrollo industrial viable y los recursos acumulados de la pequeña y mediana producción urbana y rural, de las economías ilegales, de la capitalización de remesas provenientes del exterior, y de otros recursos acumulados en el comercio, la construcción y otras áreas de la producción, no tienen dónde invertirse con rendimientos óptimos o sostenibles.

Estamos de cara a la profundización de la crisis económica en Colombia que se refleja en la quiebra de algunos fondos financieros que manejan "libranzas", con un proceso de paz incluido, una crisis política en desarrollo, una reforma tributaria estructural anunciada e inaplazable, y otros problemas acumulados en diversas áreas (salud, educación, sector agropecuario, salario mínimo, inflación, etc.).

Es el rancho ardiendo y una tormenta perfecta en desarrollo.

El movimiento obrero y social en manos de la dirección burocrática de la “izquierda tradicional” y de otros sectores liberales no va a hacer nada por sí mismo. Si no surgen fuerzas nuevas que empujen desde abajo, la explosividad social puede desencadenarse y finalmente ser canalizada por la derecha extrema neo-fascista, como ya lo estamos viendo en el paro camionero.

Frente a eso la izquierda tradicional está dividida por intereses diferentes a los de los trabajadores. Una parte de ella, asustada se refugia en Santos; otra, le hace el juego a Uribe creyendo que en medio de esa burguesía agraria y la "emergente" va a crecer; y las nuevas expresiones de lucha (jóvenes) nadan o naufragan entre esas dos aguas sin saber qué hacer.

Es por ello que la izquierda tradicional se "distrae" en temas y aspectos puntuales como la “paz”, el agro, los DD.HH., reivindicaciones sectoriales (campesinos, indígenas, camioneros, mineros, etc.) pero sin construir una visión y estrategia de conjunto.

Hay que abrir la discusión al interior de las organizaciones políticas y sociales. Las corrientes socialistas y anti-capitalistas se pueden y deben juntar (así tengan diversas miradas sobre los diferentes temas) para construir una agenda mínima con base en una unidad de acción. Ese núcleo de activistas puede servir de “foco de atracción” para una buena cantidad de gente interesada.

Este sector de personas, grupos y/o colectivos pueden ayudar a desenredar la madeja. Juntos pueden influir en el movimiento social y político en esta coyuntura tan especial.

Lo importante es tener nuevos elementos de análisis, disposición a analizar la situación con nuevas miradas y enfoques, mucho sentido práctico y ningún sectarismo o grupismo, para poder avanzar.  



[1] “Camioneros”: es la denominación que se le ha dado en Colombia a los transportadores de carga que llevan realizando a la fecha un paro de 39 días sin llegar a acuerdos con el gobierno y hoy bajo amenazas de represión, multas, suspensión de licencias y hasta expropiación de vehículos. En ese “gremio” se aglutinan empresas grandes, medianas, cooperativas, asociaciones de dueños de vehículos de transporte de carga (tracto-mulas, camiones de varios ejes, otros) y propietarios individuales. El paro es fuerte en departamentos como Boyacá, Nariño y Antioquia, en donde muchos dueños de camiones son a la vez pequeños y medianos productores de papa, café, cebolla, pequeña ganadería y otros productos. El problema se presenta por sobreoferta de vehículos, problemas de corrupción los procesos de chatarrización, altos costos de la gasolina, insumos, peajes, y bajas tarifas por efecto de la alta competencia. También, la crisis económica y la puesta en operación de oleoductos, ha debilitado la demanda del servicio. Además hay intereses transnacionales, grandes monopolios interesados en construir vías férreas, y en general, es un sector sumamente complejo y con cruces de intereses de todo tipo.   

jueves, 14 de julio de 2016

LA MEJOR FORMA DE AYUDAR A URIBE ES LLAMARLO “PARACO”

Madurez psicológica para una verdadera paz…

LA MEJOR FORMA DE AYUDAR A URIBE ES LLAMARLO “PARACO”

Popayán, 14 de julio de 2016

Colombia ha empezado a dar pasos firmes hacia el logro de su madurez psicológica. Ello a pesar de la mayoría de sus dirigentes políticos que se comportan como personas inmaduras. Ese proceso de avance es liderado por personalidades surgidas en la investigación científica, la cultura, el arte y el deporte. Rodolfo Llinás, Arturo Escobar, William Ospina, Juan Gabriel Vázquez, Ciro Guerra, Shakira, Nairo Quintana, Catherine Ibargüen, entre otros, nos dan a diario lecciones de moderación cuando valoran sus triunfos en cada una de sus disciplinas. 

Solo minorías fanáticas se rasgan las vestiduras porque Nairo no gana el Tour de Francia o porque la selección Colombia no consigue ser el campeón mundial. Claro, son los que más bulla hacen pero las mayorías celebran sus triunfos, aprecian la grandeza de su esfuerzo y se explican sus limitaciones a la hora de juzgar sus “derrotas”. Los medios de comunicación tratan de estimular el fanatismo ciego como estrategia de ventas o para amarrar la audiencia, pero esa actitud ya no es tan efectiva. Es un buen síntoma. 

Lo mismo ocurre en la política. Aunque hay desazón frente a dicha actividad, la moderación empieza a imponerse. Un caso específico es lo relacionado con el “proceso de paz”. Una buena parte de la gente ha empezado a formarse su propia opinión. Esa “ciudadanía activa” apoya la terminación negociada del conflicto armado con las FARC pero no cree en la falsa paz de Santos. Esa parte de la población valora la “mano firme” de Uribe pero rechaza su espíritu vengativo y condena el uso de métodos ilegales (paramilitarismo). Así mismo, ven con buenos ojos la actitud civilista de las FARC pero no aceptan su sobradez triunfalista.

Es evidente que todavía nos falta. Si esa “ciudadanía activa” se organiza puede ayudar a avanzar a los sectores confundidos y neutralizar a los fanáticos, que son minoría. Como se trata de un ejercicio psicológico, es interesante revisar lo que Lacan dice sobre el tema. Él plantea que existen dos formas falsas de identificación: la imaginaria y la simbólica. La primera es el “yo idealizado”; la segunda es la “idealización del yo”. La una, es la identificación con un ideal: un deportista, artista, científico o político. La otra, es la aceptación del “yo” pero limitada a lo que se cree que es la imagen de uno que los demás aceptan con agrado. Para lograr madurez hay que superar ambos tipos de falsa identificación.

Ejemplo: En Colombia los seguidores de Uribe se identifican con su imaginario idealizado: “fuerte, combativo, vengador”. Sus contradictores creen afectarlo cuando lo llaman “paraco”. Pero eso no sirve. Se fortalece esa identificación. Él utiliza esa imagen para contrastarla con la de Santos a quien identifica como “débil, perfumado, oligarca bogotano, traidor”. Ese tipo de ataques son propaganda para Uribe porque refuerza esa imagen entre sus seguidores. Se juega dentro de lo mismo y se mantiene la polarización. En realidad, el proceso de superación de esa “identificación idealizada” requiere el reconocimiento pleno de lo que somos y de lo que otros son. Con sus defectos y limitaciones, con sus cualidades y potencialidades.  

¿Cómo debilitar a Uribe sin atacarlo? El primer paso es desmitificar a sus enemigos. Hay que mostrar la complejidad de cada uno de los actores del conflicto. Las FARC surgieron de una justa resistencia campesina, es su “lado bueno”. Después, se dejaron degradar por la “guerra sucia” que los convirtió –en el imaginario popular– en “narcoterroristas”, “delincuentes” y “secuestradores”. Es su “lado malo”. Claro, ellos también ayudaron a construir esa imagen. Pero son mucho más que eso, son tan complejos como la sociedad colombiana. Pero además, hay que mostrar que la parte “mala” ha sido derrotada y que su parte “buena” puede servirle a la nación. De esa forma, desmitificando a la guerrilla, aprendemos a identificarnos nosotros mismos. Nos reconocemos en nuestra complejidad y nos preparamos para el perdón.

Esa ciudadanía “activa, ponderada y madura” organizada en un “gran movimiento” debe hacerle ver al conjunto de la sociedad que en la derrota de la guerrilla no se desconoce el papel de Uribe, Santos y sus antecesores. Pero, a la vez, debemos hacer ver que no podemos quedarnos mirando hacia atrás. Hay que superar la polarización. Debemos romper los mitos que han ido surgiendo. Hay que demostrar que se requiere otra cosa hacia el futuro. Que ya cada cual cumplió su papel y que el camino no es “aliarnos con Uribe para derrotar a Santos” ni “unirnos con Santos para derrotar a Uribe”. Ya ese momento pasó.

Si lo vemos desde el punto de vista psicológico Uribe es un ser endeble que oculta su debilidad con manifestaciones de fuerza. En vez de miedo genera lástima. Tuvo que soportar como miles de personas los abusos de una guerrilla a su vez degradada por la política imperial pero aprendió a usar su resentimiento y odio para convertirlo en poder político y económico. Ahora, que las mayorías quieren salir del conflicto armado, Uribe no es capaz de superar su “trauma” –no porque sea obsesivo e incapaz de perdonar–, sino porque cree que si lo hace, la gente que lo ha idealizado lo va a abandonar. Se ha enamorado de su “síntoma” diría Lacan. Está preso de su propia identificación imaginaria.

Por ello, no es bueno hablar de derrota. Es un “triunfo-derrota” de Uribe, Santos y las FARC. El SI a la terminación del conflicto armado es un triunfo de Uribe porque las FARC dejarán de existir como grupo armado. Es una derrota porque no los pudo exterminar y, si son inteligentes, van a sobrevivirlo desde el punto de vista político. Es triunfo de Santos porque logra la desmovilización y el desarme de las FARC y es derrota, porque ese hecho no se puede identificar con la plena Paz. Y es una derrota de las FARC porque la sociedad no los recibe como sus liberadores (si así fuera no pedirían cupos en el Congreso, estarían seguros de su “triunfo político” como pasó con el M19 en 1990), pero también es un triunfo porque obligaron al Estado a negociar y logran proteger a la población de sus territorios históricos.

Así, si un movimiento ciudadano abre la brecha y gana las elecciones de 2018 será un triunfo construido tanto sobre las derrotas de Uribe, Santos y las FARC, pero también, sobre sus triunfos. Si lo hace, logrará que la sociedad colombiana cambie su identificación imaginaria por un reconocimiento de su complejidad: de la existencia de conflictos de clase, región, etnia, género, culturas e intereses diversos, que deberán tener solución civilista y pacífica.

La identificación simbólica (“cómo nos vemos nosotros mismos”) también está cambiando. La superación del conflicto armado nos va a ayudar enormemente. Los extranjeros podrán venir y descubrir la complejidad colombiana y nosotros avanzaremos mucho más en la tarea de identificarnos con lo mejor de lo que somos: un pueblo trabajador y sufrido, recursivo y alegre, cosmopolita y abierto, que puede construir su futuro en paz buscando alternativas nuevas para superar la desigualdad, acabar con la corrupción político-administrativa, y consolidar nuevas hegemonías sociales que dejen atrás nuestro pasado colonial, patriarcal, racista, clasista, excluyente, clerical y reaccionario, que ha sido la causa de todos nuestros anteriores y cruentos conflictos armados.


De esa forma, Colombia alcanzará la madurez y será “otra” sin dejar de ser la misma.     

martes, 12 de julio de 2016

LA REPÚBLICA QUE NUNCA FUE

LA REPÚBLICA QUE NUNCA FUE

Popayán, 12 de julio de 2016

La precaria "república" surgida de la Constitución de 1991 está casi muerta. Sufrió 43 operaciones (reformas) que fueron sólo remiendos y la mantienen con respiración artificial. Nada funciona. No hubo "democracia participativa" en 25 años. La corrupción lo ha contaminado todo. No existen verdaderos partidos políticos, son negocios particulares y agencias comerciales de avales. Hasta la protesta social está permeada por intereses oscuros y “corporativos”. No existió verdadera descentralización. Los derechos fundamentales, la plurinacionalidad (étnica y regional) y la multiculturalidad se quedaron en el papel. Todo fue privatizado y el capitalismo salvaje impuso su ley. Los órganos de control no controlan nada. La justicia –que debía ser el freno a la corrupción– se corrompió. Ni siquiera la Corte Constitucional está ajena a ese fenómeno: ahora legisla, hace política, sustituye a otros poderes, y protege a los corruptos. La figura y el cargo de Fiscal que debía ser “independiente”, hoy es uno de los cargos políticos más apetecidos y objeto de presiones económicas y políticas de todo tipo. La tutela sobrevive más como apropiación del pueblo que como parte de la Constitución pero sirvió también para convertir la lucha popular en un simple trámite jurídico individual que poco a poco va perdiendo su eficacia. En fin, la CP91 es un cadáver descompuesto del cual sólo queda su pedestal neoliberal que era lo único que necesitaba la casta dominante.

Y ahora esa "república" muerta (que nunca realmente nació sino que fue un aborto) quiere ser "revivida" con el aliento de una "paz" que no es paz, que es apariencia de paz. Y para ello quieren convocar una Asamblea Constituyente que no será realmente constituyente, será un "fantasma" de la de 1991, encargada de poner a andar la "república" al estilo de los "zombis vivientes" de las películas de terror actuales. Es la ilusión que se repite desde la época del "General" Santander que creía que la ley cambiaba la realidad. Y hoy se mantiene esa ilusión. Se aprueban cientos de leyes para que todo siga igual. “Hecha la ley, hecha la trampa” dice el avivato y “La ley es para los de ruana”, continúa gritando el pueblo sin que sea escuchado por nadie.  Por eso, precisamente por eso, Colombia nunca ha sido ni siquiera una Primera República. Nunca hemos dejado de ser colonia. Sin identidad y sin destino.


La única vía es actuar “de hecho”. Organizar un movimiento ciudadano que unifique a las fuerzas sanas de la nación –que son las mayorías–, y convertirlo en herramienta para dar el primer paso, que es, sacar del gobierno a los deshonestos. Desenmascarar y derrotar a los corruptos que son verdaderos carroñeros, viven de la podredumbre y de la descomposición. No se necesitan –por ahora– nuevas leyes, solo decisión, convicción y voluntad. La terminación negociada del conflicto armado, que ya es un hecho, abre todas las compuertas y nos ofrece todas las oportunidades para salir del “túnel” en que hemos vivido durante los últimos 68 años (desde el asesinato de Gaitán). ¡Es ahora o nunca!     

lunes, 11 de julio de 2016

PAZ SIN CORRUPTOS


Los corruptos no pueden construir la paz.
Los violentos –si se desarman y desarman los espíritus– si pueden construir la paz, pero...
1. ... mientras los gobernantes sean corruptos, no habrá paz en Colombia.
2. ... mientras los gobernantes promuevan la injusticia, no habrá paz en Colombia.
3. ... mientras los gobernantes no promuevan la generación de empleo digno, no habrá paz en Colombia.
4. ... mientras los gobernantes violenten la naturaleza (medio ambiente) con mega-proyectos minero-energéticos, no habrá paz en Colombia.
Para construir la paz hay que empezar derrotando a los corruptos. Es la primera tarea.

sábado, 9 de julio de 2016

LA REBELIÓN SE JUSTIFICA

LA REBELIÓN SE JUSTIFICA

Popayán, 9 de julio de 2016

El gran problema ideológico de esta "paz", el importante gol que nos mete la casta dominante, los minutos que nos cogen "en bajada", consiste en el mensaje que incluso algunos "revolucionarios" ayudan a posicionar en la cabeza del pueblo:

"La rebelión y la lucha armada no pagan".

Mientras tanto ellos (el imperio, las castas dominantes) utilizan impunemente la violencia y la guerra para defender sus intereses e imponer su poder (Afganistán, Irak, Libia, Ucrania, Siria, etc.).

¿Por qué logran posicionar ese mensaje?

Porque desde nuestro lado - el del pueblo -, no se reconoce que se cometieron graves errores. No hay capacidad crítica para explicar que la resistencia campesina inicial no sólo fue justa sino necesaria y que el problema consistió en no tener claridad para...

1. No dejarse degradar en medio de la guerra dirigida e impuesta por el imperio.

2. Ilusionarse con el triunfo militar sin contar con el apoyo general y mayoritario del pueblo.

3. No negociar cuando se llegó al máximo de acumulación de fuerza política y militar (1998).

Sin embargo, ante la realidad del capitalismo decadente y criminal debemos reafirmar lo que es evidente...

... la rebelión se justifica! Pero debe hacerse con inteligencia y contando con las grandes mayorías ciudadanas y populares.

&&&&&&

Nota: El tema que he propuesto no es porque no esté de acuerdo con el proceso de terminación negociado del conflicto armado en Colombia. Ni porque no quiera la paz. No. Se trata de señalar un fenómeno bien interesante que está ocurriendo con la oligarquía colombiana. La casta dominante no sólo quiere que la guerrilla se desarme sino que como de todas maneras la insurgencia se les convirtió en un "karma", además de querer borrar la guerrilla en lo "físico" (el anhelo de Uribe era exterminarla), desean apasionada y fundamentalmente borrar también lo que es su "fantasma" (o "síntoma" diría Lacan).


Ese "fantasma" está contenido en el espíritu de rebeldía de nuestro pueblo que ha estado oculto y reprimido por efecto de la degradación de la guerra y tantos años de frustración y sufrimiento. Es decir, no se contentan sólo con la derrota política de las FARC (ya que pueden asimilarlos al sistema y lo van a tratar de hacer) sino que los quieren derrotar ideológicamente, o sea, desaparecer el "fantasma de la rebelión", sacar del imaginario colectivo la resistencia armada al igual que han intentado borrar de la mente del pueblo a Jorge Eliécer Gaitán, como símbolo que ha sido de la emancipación popular y de la única derrota que vivieron en 1946 cuando éste se les apoderó del partido liberal. (Ello explica por qué no sólo lo mataron sino porque han desarrollado lo que su hija llama "memoricidio". Y allí está el origen de toda nuestra tragedia).  

viernes, 8 de julio de 2016

¿EL CIRCO DE LA PAZ?

¿EL CIRCO DE LA PAZ?

Popayán, 8 de julio de 2016

Las FARC ya anunciaron que se desmovilizarán, entregarán armas y se integrarán a la sociedad para hacer política. Esa manifestación ya debería servir para pasar a los hechos.

¿Por qué el gobierno insiste en realizar un Plebiscito para refrendar los acuerdos? ¿Por qué se empeña –más que la misma guerrilla– en gastar recursos en esa elección que de no conseguir arrastrar a millones de personas lo que va es a fortalecer a Uribe?

No parece lógico. La única razón es que Santos calculaba que el entusiasmo por la paz iba a crecer entre el pueblo y que él podría ratificar su triunfo electoral de junio de 2014. Pero eso no va a ocurrir. Por ello tienen que organizar un circo.

“La simple y pura paz” no necesita tanto circo. Si le ponen tanto espectáculo es porque no es simple y no es pura. Por eso le ponen adjetivos, "imperfecta", "precaria", "pura y simple", para "dorar la píldora", dado que necesitan engañar al pueblo.

El “circo de la paz” tiene como principal objetivo lavarle la cara al gobierno del presidente Santos, ocultar su mal gobierno, tapar la corrupción, desviar la atención de la entrega descarada de nuestros recursos a inversionistas extranjeros y legitimar la segunda versión del paquete neoliberal.

Y nosotros deberíamos estar felices porque el pueblo no coma cuento. Pero no, la izquierda en Colombia se volvió “plañidera” del régimen. Está preocupada de que el pueblo no crea en la paz de Santos. Y entonces, entra a ser parte del circo. Se disfraza de coro lastimero.

En vez de estar feliz de que el pueblo ya no le cree mucho a la casta dominante, la izquierda está preocupada y por ello se presta para contribuir con el “show”.

Al contrario, planteamos que si se convocan elecciones para refrendar los acuerdos de paz mediante un Plebiscito, organicemos un gran movimiento para subirnos al escenario y desenmascarar a los payasos que se disfrazan de “pacifistas”.  

Claro, llamaremos al SI, pero ese no será el objetivo principal.

Se trata de sacar de los corrales a los lobos vestidos de ovejas; bajar de los columpios a los malabaristas (corruptos) enmascarados de “gente honorable”; quitarle el antifaz al verdugo uribista acicalado de “luchador contra la impunidad”; desnudar al animador del circo que envestido de “presidente de la paz” prepara la guerra contra el pueblo.

Y, ante todo, desenmascarar al dueño del circo (imperio) que posa de gran benefactor.


Así, aprovecharemos el “circo de la paz” para construir un movimiento ciudadano y popular que organice la “guerra a los corruptos”, defienda nuestros recursos naturales (medio ambiente) y se prepare fuertemente para luchar por el cambio de modelo económico y poder generar empleo digno y formal, base indispensable para construir la verdadera paz. 

jueves, 7 de julio de 2016

CÉSAR GAVIRIA Y “LUCHO” GARZÓN, DOS TIMADORES A LA SOMBRA DE LA PAZ


CÉSAR GAVIRIA Y “LUCHO” GARZÓN, DOS TIMADORES A LA SOMBRA DE LA PAZ  

Popayán, 7 de julio de 2016

Cómo estará de desorientada nuestra izquierda colombiana que...

... mientras la casta dominante se concentra en usar el tema de la paz para aplicarnos el segundo paquete neoliberal (similar al de 1991), encargando para esa tarea a César Gaviria, el iniciador de la era neoliberal (apertura económica y privatizaciones) y a "Lucho" Garzón, el más grande esquirol y traidor de los trabajadores...

- Clara López pide más impuestos desde Washington preparándole pista a la reforma tributaria;

- Robledo impulsa un referendo por el agro porque no sabe más qué hacer;

- Petro sigue enfrentado con Peñalosa por temas locales (bogotanos) porque no ha asimilado su derrota;

- Y el resto de la izquierda sigue a la cola de la estrategia "santista".

Debemos despertar... la terminación negociada del conflicto armado ya es un hecho y el tal plebiscito sólo es un distractor frente a los temas gruesos que a la sombra de la "paz" nos están clavando:

- Hacer pasar por grandes pacifistas a quienes son los causantes de la guerra;

- Pintar de "buena gente" a toda clase de corruptos empedernidos como los Roy Barreras, Serpas, Cristos, Benedettis y demás;

- Justificar la destrucción de la naturaleza con megaproyectos basados en inversiones extranjeras para poder financiar la paz;

- Y engañar con nuevas Constituyentes para remendar una Constitución que es un verdadero ornitorrinco (que no se sabe qué es).

&&&&&&&&&

“Bienvenidos al futuro” fue la consigna de César Gaviria al posesionarse de presidente de la República el 7 de agosto de 1990. ¿De qué futuro hablaría? ¿A quién enviaría ese mensaje?


Seguro que era para los grandes dueños de las empresas transnacionales porque durante estos 26 años pasados quienes se apropiaron de nuestro país son los dueños de Anglo Gold Ashanti, Comcel-Claro, Movistar, P&G, BVVA, y demás inversionistas extranjeros. 

&&&&&&&

Debemos denunciar el “plebiscito” como un circo diseñado para engañar al pueblo. Las FARC ya anunciaron que se desmovilizarán y entregarán armas así gane el “SI” o el “NO”. De tal manera que esas elecciones –si se hacen– son sólo para hacer politiquería y demagogia.


De todas maneras, si aprueban el Plebiscito, hay que organizar un gran movimiento ciudadano para participar y aprovechar los espacios de esa campaña electoral para impulsar un programa mínimo: Sí a la paz sin corrupción; defensa del medio ambiente; y cambiar el modelo productivo para generar empleo digno y formal.  

miércoles, 6 de julio de 2016

TEMÍSTOCLES ORTEGA Y LOS ROBOS DE PROBOLSA E INDEPORTES

TEMÍSTOCLES ORTEGA Y LOS ROBOS DE PROBOLSA E INDEPORTES

Popayán, 6 de julio de 2016

Para quienes no lo saben o lo han olvidado. En noviembre de 2008 se descubrió el robo de más de 16.000 millones de pesos de la salud y educación a manos de funcionarios de la administración departamental dirigida por el Gobernador Guillermo Alberto González.

Aprovechando el desorden administrativo se habían depositado dichos dineros en una captadora ilegal de dinero denominada PROBOLSA. Pero todo apuntaba que en verdad esos recursos habían sido invertidos en DRFE (una pirámide “financiera” que era un lavadero de dineros del narcotráfico). Cuando se quebró DRFE, el 8 de noviembre, salió a relucir el escándalo.

En ese tiempo nos organizamos y constituimos una Veeduría Ciudadana. Se pudo comprobar la responsabilidad del Gobernador, aparecieron las autorizaciones, firmas de pagarés, cartas comprometedoras, y en fin, las suficientes pruebas que comprometían al Gobernador quien para defenderse cobardemente responsabilizó a su Secretario de Hacienda y a la Tesorera del Departamento, de entonces.

Con los integrantes de la Veeduría viajamos a Bogotá, entregamos todos los documentos que probaban la responsabilidad de Guillermo Alberto González, ante la Procuraduría General de la Nación y ante la Fiscalía General, pero no pasó nada. Uribe metió la mano y con la asesoría jurídica de Temístocles Ortega, ese grave delito contra el pueblo quedó impune.

La mayor parte de la población de Popayán y del Cauca no movió un dedo ante la corrupción. El gobernador "Probolsa" siguió presidiendo el Festival Gastronómico y todo pasó como si nada hubiera pasado. Sigue siendo una "honorable persona", habla de democracia y de justicia, y muchos parroquianos pagan por sacarse fotografías a su lado.

Hoy ha reventado un nuevo escándalo. Se habla de más de 1.000 millones de pesos del Instituto de Deportes del Cauca INDEPORTES, que se habrían utilizado para hacer proselitismo en la pasada campaña electoral. La gerente y 5 funcionarios están presos y están en camino de acudir a la negociación con la Fiscalía para lograr la sentencia anticipada.

Todo parece indicar que está comprometido el gobernador saliente, Temístocles Ortega y el gobernador entrante, Oscar Campo. Así lo señalan los medios de comunicación. El Zar Anticorrupción Camilo Enciso trasladó la documentación del caso ante la Corte Suprema de Justicia. Ver: http://bit.ly/29otulR.

Seguramente pasará lo mismo que con el robo de PROBOLSA. Los pícaros con poder se saldrán con la suya. Mucho más ahora que estamos frente a un nuevo "pacto de paz" y la clase política caucana –incluyendo a los "Verdes" y las organizaciones sociales que apoyaron a Temístocles (ASI, MAIS, CRIC, CIMA)– y los que apoyaron a Oscar Campo, no dicen nada. Muchos de ellos ya tienen puesto o contratos asegurados.


¿"Paz" con corrupción? Eso se pregunta en los corrillos y en voz baja nuestro cortesano pueblo. ¡Qué tristeza!   

martes, 5 de julio de 2016

LA TRAMPA IDEOLÓGICA DE LA PAZ

LA TRAMPA IDEOLÓGICA DE LA PAZ

Popayán, 5 de julio de 2016

"El objetivo fundamental de la fantasía ideológica es acallar el antagonismo social".

Slavoj Zizek

La paz como constructo ideológico le sirve al imperio, a Santos, a Uribe y al establecimiento oligárquico.

La "paz", la "nación", los "derechos humanos", sólo son ilusiones ideológicas para hacerle creer a las personas que todos somos iguales ante la Ley.

Por ello un colombiano humilde siente como un triunfo suyo cuando James Rodríguez o Luis Carlos Sarmiento Angulo logran grandes éxitos. "Ah... es que es colombiano".

Así mismo, millones de mexicanos humildes se sienten orgullosos de que Carlos Slim sea el empresario más rico del mundo. No importa que los explote y robe a ellos mismos.

Por eso tanta gente admira a Barack Obama porque no sólo fue el primer negro que llegó a la presidencia de los EE.UU. sino porque ganó el Nobel de la Paz, así sea el primer terrorista y más grande criminal del mundo.

&&&&&&

Pero la "paz" también le puede servir al pueblo siempre y cuando nos apartemos de la ideología dominante. Ello implica hacer nuestro propio ejercicio mental.

Si hoy el lema de "paz para el pueblo" lo convertimos en la mente de la gente en "guerra a los corruptos", estaremos dando un primer paso de enorme importancia.

Eso es lo que no entienden los que creen que puede existir una "paz pura y simple". Así concebida, es una "paz" para mantener los privilegios de los poderosos y es un auto-engaño para los que creen que los burgueses de buena voluntad van a darle "un nuevo trato social" al pueblo.

&&&&&&


Esa fue la concepción de paz que se impuso en 1991. Por ello es que la casta dominante la celebra con tanta felicidad.

lunes, 4 de julio de 2016

EL M19 NUNCA PASÓ LA PRUEBA


Recordando el auge democrático de 1991…

EL M19 NUNCA PASÓ LA PRUEBA

Popayán, 4 de julio de 2016

Con cuánto éxito los dirigentes del M19 consiguieron dilapidar el capital político del auge democrático de 1991 en Colombia.

Unos, terminaron sirviendo al gobierno más neoliberal que hemos tenido como fue el de César Gaviria (1990-1994), ayudando a aprobar la Ley 100 de Salud, las normas privatizadoras de los servicios públicos y la venta del país al capital transnacional.

Otros, terminaron al lado de Uribe, vendiendo hasta la conciencia para ser funcionarios de segundo nivel.

Uno solo de todos ellos, intentó mantener una línea "alterna", enfrentando a Uribe y al paramilitarismo pero mantuvo la ilusión en una supuesta "burguesía progresista" hasta que Santos lo traicionó.

El grueso de esa dirigencia liberal-democrática terminó naufragando en la burocracia estatal o en los negocios privados... ora con Samper, ora con Pastrana, ora con Santos, ora administrando ONGs para ayudar a lavarle la cara al régimen.

Las nuevas generaciones en este aniversario de la Constitución de 1991 deben conocer esa historia y evaluar esa experiencia.


Ahora, con el nuevo proceso de paz, la casta dominante ya ha avanzado para volvernos a repetir la dosis...

LA CONSTITUCIÓN DE 1991: LA GRAN ESTAFA

LA CONSTITUCIÓN DE 1991: LA GRAN ESTAFA
Popayán, 4 de julio de 2016
La casta dominante celebra los 25 años de la Constituyente de 1991 como un gran triunfo. Y claro, lo fue para ellos.
De esa CP91, lo único que medio sirvió fue la Tutela. Lo demás, fueron grandes y pomposos derechos fundamentales pero en el papel.
Ahora es igual. Mientras los Timochenkos se desarman ponen a los Arismendis a tratarlos bien y a hacerles guiños. Ya veremos después...!
Si a un Gustavo Petro que ha sido un alumno juicioso de la democracia, "se ha portado bien" y ha respetado la legalidad, lo atacaron, bloquearon y trataron como un enemigo siendo Alcalde de Bogotá...
... ¿qué no harán cuando un "fariano" llegue a un alto cargo del Estado?
Es bueno que se supere el conflicto armado pero no nos hagamos ilusiones...
¡Paz para el gran Capital...guerra para el pueblo!
(Y Antonio Navarro ni Petro han evaluado esa experiencia... y ahora, proponen un nuevo circo!)

domingo, 3 de julio de 2016

CONSTRUIR UN PROGRAMA DEL PUEBLO PARA LA VERDADERA PAZ

¿Puede haber una “paz pura y simple”?

CONSTRUIR UN PROGRAMA DEL PUEBLO PARA LA VERDADERA PAZ  

Popayán, 4 de julio de 2016

Mientras el gobierno de Santos aprueba aspectos esenciales de la paz que la casta dominante requiere e imagina, sectores de izquierda promueven una supuesta “paz pura y simple”.

El gran capital tiene en la mira el despeje de nuevas áreas de explotación petrolera, minera y agrícola que ven como el gran botín de la paz. Han aprobado la Ley Zidres para implementar su modelo agro-exportador, el ministro de Hacienda anuncia la “nueva economía” con base en inversión extranjera, se aprueba el Nuevo Código de Policía y el fortalecimiento de los ESMAD para reprimir “con fortaleza y decisión” las protestas sociales, y preparan la reforma tributaria “estructural” que afectará las rentas de trabajo.

Del otro lado nos llaman a “no atravesarle palos a la paz”. Se lanzan campañas insípidas desde sectores de izquierda y se le hace eco a la ministra de Trabajo que todos los días anuncia que el posconflicto será el escenario de un “nuevo trato social” y que se va a construir “nuevas relaciones entre trabajadores, empresarios y Gobierno” (http://bit.ly/29hmJ5f). Mientras Santos con frialdad y franqueza ofrece garrote al pueblo (http://bit.ly/297sdPb), la izquierda gobiernista promete un paraíso en donde la lucha de clases será cosa del pasado.

Por el contrario, debemos decir que ahora que el proceso de terminación del conflicto armado es un hecho irreversible, el énfasis no puede seguir estando en la “pura y simple paz”. Eso es puro y simple oportunismo. Ya el comandante Carlos Antonio Lozada planteó que “aunque gane el NO en la refrendación, las FARC no volverán a la guerra” (http://bit.ly/297Ouk8). Pero el gobierno no renuncia a su plebiscito porque Santos necesita legitimar políticamente “su paz”, hacer politiquería con la paz, engañar al pueblo, imponer la idea de que puede haber una “pura y simple paz”.

Siguiendo las “Lecciones de Táctica” (http://bit.ly/29mroVK) del ideólogo que dicen seguir los impulsores de la “pura y simple paz”, el énfasis ya no debe estar en la terminación del conflicto armado con las FARC. Ésta ya es un hecho. Ya se anunció “el fin de la guerra” y se aprobó el cese bilateral de fuegos definitivo. Ahora la tarea inmediata de la lucha por la paz es construir un Programa del Pueblo por la Verdadera Paz, que entusiasme a la población en la campaña electoral para refrendar los acuerdos, y que muestre la forma como se puede y debe construir la paz que la sociedad colombiana necesita.

En esa dirección se proponen los siguientes temas que deben hacer parte de ese programa mínimo por la verdadera paz: lucha contra la corrupción, defensa integral del medio ambiente y cambio del modelo productivo para poder generar empleo.     

La lucha contra la corrupción  

No hay necesidad de presentar cifras sobre el impacto de la corrupción en la vida colombiana. Afecta la vida de todos. Es la causa principal de la violencia. Anula cualquier ejercicio democrático. Se ha insertado en todo el aparato estatal. Es un elemento esencial en la dinámica económica y política. Ya es parte de nuestra cultura. La sufren todos los partidos políticos sin excepción. “Los de abajo” la permiten y practican porque “los de arriba” siempre la han utilizado. Por ello no puede haber justicia ni leyes que sirvan. ¿Por dónde empezar?

Un movimiento ciudadano y popular que quiera distanciarse del ejercicio diseñado por la casta dominante de “instrumentalización de la paz” para engañar al pueblo, tiene que plantear en este tema una estrategia nueva y contundente. No como hizo Mockus que quería combatir la corrupción pero ponía en la mira la “corrupción” del tendero, del vendedor ambulante, del “contribuyente” o el peatón. Si en verdad queremos ganarnos a la gente para la causa de la paz hay que plantear que vamos a empezar a erradicar la corrupción incrustada en los altos niveles del Estado. Si la sal se corrompió hay que cambiar la sal y el salero. ¡Hay que derrotar a los corruptos! Y por eso, no podemos hacer campaña por la terminación del conflicto armado estando a su lado o cogidos de la mano con ellos.

Pero además, debemos plantear la forma como vamos a acabar con la corrupción. Hay que ponerle enormes y afilados “dientes” y “garras” a esa tarea. Dos herramientas son básicas: una efectiva y consistente meritocracia en la escogencia de los funcionarios que impida que los ladrones se cuelen en la administración pública, y una política de transparencia en la contratación pública basada –no en normas y organismos de control que están cooptados por la politiquería y la corrupción–, sino sustentada en la participación organizada de las comunidades, pasando por encima incluso de las organizaciones sociales controladas por burocracias, ONGs y partidos políticos. No será fácil pero no es imposible. Hay ejemplos de cómo se ha hecho.

La lucha por la “Paz sin corrupción” –si se sabe plantear bien– va a romper a todos los partidos políticos sin excepción. La lucha por construir la verdadera paz ya empezó. Todo está dado para que los “cascarones políticos” pegados alrededor de los votos y los avales, salten hechos añicos por la dinámica y la acción ciudadana. Eso esperamos.

La defensa integral del medio ambiente

Un enorme factor de corrupción y violencia es la forma como se ha permitido la contratación de los proyectos de explotación petrolera que está en manos del presidente de la República desde que el gobierno de los EE.UU. impuso la ley 120 desde 1919. Ni el Congreso puede controlar y vigilar tal situación. Pero al lado de ese enorme vacío legal y administrativo todos sabemos cómo las poderosas empresas transnacionales y grandes grupos económicos controlan la ejecución de la política ambiental. Por ejemplo, Smurfit Kappa tiene asiento directo o indirecto en altos organismos de política ambiental y, controla, así mismo, las Corporaciones que controlan esa materia en departamentos y regiones. Y lo mismo hacen todas las empresas transnacionales de la minería, los grandes contratistas de megaproyectos energéticos y los inversionistas del gran capital de todas las áreas de la economía.

En ese sentido un movimiento ciudadano que desee relacionar el tema de la defensa de la naturaleza frente a los grandes proyectos minero-energéticos, agroindustriales y turísticos, y a la vez ligar esa tarea con la construcción de la paz, debe tener absolutamente claro los siguientes puntos que sintetizamos de la siguiente manera pero que deben tener un desarrollo más amplio en un posterior artículo:

- Reconocemos que los grandes proyectos de explotación petrolera y/o minera son necesarios para el desarrollo económico de la nación y que –por ahora– se requiere la inversión extranjera;

- Dichos proyectos no pueden ni deben realizarse en zonas de reserva natural, páramos o lugares que puedan afectar fuentes hídricas y/o ecosistemas protegidos;

- Se debe exigir el cumplimiento estricto de las normas ambientales complementado con el control social de la población y las comunidades afectadas y/o vecinas;

- Debe existir una absoluta claridad y transparencia en la contratación de los proyectos;

- Tienen que garantizarse condiciones especiales de seguridad pública; y

- Debe realizarse una previa capacitación de la población para poder acceder a los empleos formales de todo nivel e impulsar programas estatales de desarrollo productivo para evitar los graves impactos sociales que tienen los megaproyectos minero-energéticos en esas regiones.

Fortalecer el aparato productivo nacional

La paz no se puede construir en un país en donde la mayoría de las personas viven en la informalidad, subempleo, precariedad laboral y el desempleo. Es claro que la única forma de generar empleo digno y formal en Colombia es diseñar e impulsar una política económica de emergencia social que nos permita fortalecer el aparato productivo de la nación. Ya el ministro de Hacienda reconoció que la industria, la agricultura y el turismo deberán ser el eje fundamental de la “Nueva Economía”. Pero él, y todos los tecnócratas neoliberales de ese ministerio y de Planeación Nacional, conciben esa nueva economía en manos del Gran Capital Transnacional. Para eso es que necesitan desarmar a las FARC y despejar los territorios ricos en recursos naturales, tierras fértiles y sitios turísticos rentables. Así lo han reconocido.

Es evidente que un movimiento ciudadano no puede oponerse en este instante a continuar atrayendo la inversión capitalista extranjera pero deberá diseñar formas creativas y viables para que el Estado colombiano participe equitativa e integralmente en esos proyectos, se establezcan cláusulas contractuales de reversión de activos, impuestos sobre las ganancias, y en general, diseñar una forma en que empresas asociativas de las comunidades, pequeños y medianos productores, participen como socios importantes de esos proyectos y se preparen para operar los proyectos cuando a las empresas inversionistas se les terminen los períodos y tiempos concesionados.

Pero además, retomando experiencias de proyectos productivos desarrollados en regiones de Brasil, la India y otros países, se deben crear empresas basadas en relaciones colaborativas y asociativas como las que ya existen en manos de productores de café (Cauca), cacao (Santander), leche (Antioquia), en donde los trabajadores y los productores no sólo desarrollen procesos de industrialización y procesamiento de nuestras materias primas sino que organicen e implementen proyectos de comercialización internacional de esos productos en los países súper-desarrollados, que es donde se realiza efectivamente la ganancia.

Conclusión

Un movimiento ciudadano y popular que en verdad quiera convertirse en alternativa de gobierno en Colombia debe deslindarse y enfrentar la falsa política de paz del gobierno que en verdad es de guerra contra el pueblo. Debe confrontar la política guerrerista de Uribe que ya es cosa del pasado y debe desenmascarar la “ingenua” política de la izquierda gobiernista que está dirigida a desarmar ideológica y políticamente a las organizaciones populares para limitar nuestras luchas a la “simple gestión del post-conflicto”.

La campaña por la refrendación de los acuerdos debe ser una gran batalla de ideas en donde demos pasos conceptuales para posicionar entre el pueblo los aspectos programáticos esenciales para construir una verdadera paz… sin corrupción, con medio ambiente protegido y generación de empleo digno y formal.


E-mail: ferdorado@gmail.com / Twitter: @ferdorado