CARTA ABIERTA A LOS Y LAS JÓVENES DEL MS-E24
Estimados y estimadas jóvenes:
Desde el momento en que Ustedes
tomaron la iniciativa de convocar la protesta del 24 de enero del presente año
(2016) no sólo estuve de acuerdo con ese llamado sino que comprendí que eran
expresión de un sector social –los jóvenes trabajadores y los “profesionales precariados”
de las ciudades– que de años atrás venía manifestándose de diversas maneras
para hacer escuchar sus voces sobre la situación del país y participar
activamente en la vida política de la Nación.
Ustedes hacen parte –tal vez sin
saberlo– de un movimiento mundial que desde hace década y media se ha expresado
por construir una democracia real, contra la globalización neoliberal y contra
un sistema capitalista que ha entrado en una fase de auto-destrucción causando
enormes desastres sociales, económicos, ambientales y culturales que nos empujan
por el camino de la hecatombe ambiental y de la extinción de la civilización
humana.
Estuve de acuerdo –en ese
momento– con su propuesta de un pliego de lucha que recogiera los problemas más
sentidos por los trabajadores y el pueblo colombiano. Mostraban Ustedes un gran sentido de la
oportunidad y sentido práctico. Mucho me agradó que esos puntos tuvieran un
carácter general pero concreto, y que además, tuvieran la intención de
movilizar a sectores no-organizados y a personas que nunca habían tenido la
oportunidad de protestar.
Desgraciadamente ese esfuerzo se
encontró con un ambiente de polarización en el país que impidió que el llamado
obtuviera una respuesta más contundente. La situación creada en torno al “proceso
de paz” enfrentaba a las fuerzas que trataban de utilizar cualquier motivo para
debilitar al gobierno y los sectores que se oponían a tal pretensión. Ese contexto
de confrontación entre unas supuestas “derechas” e “izquierdas”, fue un
obstáculo para movilizar a amplios sectores inconformes que hay en nuestro
país. Pero, ese intento obligó a las burocracias obreras –así hubiera sido
tímidamente– a confrontar al gobierno.
Esta experiencia debe haberles
servido para entender la complejidad de nuestra sociedad. En ella existen diversas
clases y sectores de clase; disímiles etnias, culturas y pueblos; variados intereses
económicos en juego; múltiples visiones políticas que influyen en las
organizaciones sociales y en los partidos y grupos políticos; y si no se tiene
claridad frente a esa complejidad se corre el peligro de ser utilizados por uno
u otro sector. Es necesario precisar que Ustedes aparecen en un instante muy
difícil que está en pleno desarrollo y que no ha sido fácil de enfrentar ni
siquiera para organizaciones con vasta tradición de lucha.
Por ello, el llamado que les
hago, desde mi modesta posición de veterano activista social es a mantener ese
entusiasmo, persistencia, espíritu de lucha y ganas de apoyar las luchas
populares pero –paralelamente– tener paciencia, estudiar, debatir, evaluar al
máximo la historia y ayudar a construir con una visión muy amplia, por un lado,
un movimiento social que interprete y recoja los intereses de lo que denomino
los “nuevos trabajadores” (técnicos, tecnólogos y profesionales precariados), y
por el otro, una organización o colectivo político que se proponga la tarea de
construir un Nuevo Proyecto Político. Son tareas diferentes y cada una debe
tener propósitos claros y métodos diferentes.
Soy una persona muy crítica de mi
generación que no pudo construir pensamiento propio y auténtico, fuimos
influidos por corrientes políticas internacionales y cometimos demasiados
errores de dogmatismo y unilateralidad. La guerra de la que estamos saliendo
fue uno de esos errores. Fuimos incapaces de diseñar una estrategia adecuada
para unificar a todos los sectores sociales que necesitan un cambio profundo en
las estructuras económicas del país. No logramos derrotar la politiquería y el
clientelismo y caímos en aventuras sectarias que nos aislaron de la población
en general. No entendimos la importancia de realizar un trabajo
pedagógico-cultural que a partir de lo que somos (indo-afro-euro-americanos),
nos hubiera permitido potenciar nuestras capacidades humanas y aprovechar nuestras
enormes riquezas.
Lo que nos muestra la historia es
que en cada época o fase histórica existe una clase social que es la que se
coloca al frente de la sociedad para jalonar los cambios posibles y necesarios
para ese instante. La burguesía fue una clase revolucionaria en su momento y
propició las revoluciones liberales. El proletariado industrial encabezó las
luchas socialistas del siglo XX pero sus esfuerzos se concentraron en querer
hacer las transformaciones desde el Estado y por ello fracasó. Hoy está
surgiendo una nueva clase social que es la que Ustedes representan.
El momento es propicio para que
los jóvenes de este país alcen la cabeza con autonomía, independencia, cierto
arrojo y valentía. Colombia empieza a romper con su aislamiento histórico y hoy
se necesita una dirigencia que piense verdaderamente en grande. Es necesario
aprender de los movimientos sociales que surgieron en los levantamientos árabes
de 2011, los indignados españoles y griegos, la reciente movilización de los
jóvenes y trabajadores de Francia a partir de lo que se llamó “Noche de Pie” y las
luchas de Turquía y Brasil.
Además, pienso que la principal
tarea que tenemos hoy con ocasión de la terminación del levantamiento armado de
las FARC es ayudar a conformar un gran “movimiento ciudadano” que se organice y
prepare para derrotar en las elecciones de 2018 a la “burguesía burocrática”,
que es la clase que aglutina a aquellos que se enriquecen y viven del Estado, o
sea, el “sumun” de la corrupción, representada por la gran mayoría de las cúpulas
políticas de los partidos tradicionales (liberal y conservador) y de los “nuevos”
(Cambio Radical, la “U”, Centro Democrático y otros).
Si se cumple con éxito esa
primera y vital tarea, las fuerzas democráticas y populares de nuestro país van
a poder quitarse una gran carga de encima. Derrotar la politiquería, el clientelismo
y la corrupción será un paso clave para poder avanzar por nuevos caminos de
reivindicación y emancipación social. Además, nos desataremos las manos para contribuir
con las luchas de los pueblos latinoamericanos y del mundo, dar un gran “salto civilizatorio”
y construir una verdadera humanidad que haga posible una vida más justa y
vivible.
Si Ustedes se organizan por aparte,
crean un movimiento propio y diseñan una estrategia a mediano plazo, pueden
participar de ese esfuerzo pero sin diluirse o dejarse cooptar de otros
partidos o fuerzas políticas, y podrán impulsar nuevas formas de acción política sin caer en el electoralismo
funcional al régimen y/o en clientelismos de nuevo tipo que ya corroen con sus
vicios y prácticas corruptas a los partidos que se dicen promotores del cambio
(Verde, Polo, etc.). Y estoy seguro, no sólo aprenderán mucho sino que harán un
importante aporte.
Les deseo éxito en las deliberaciones
que van a tener próximamente y cuenten con mi modesto apoyo en lo que Ustedes
consideren.
Atentamente,
Fernando Dorado, activista social
Popayán, 12 de septiembre de 2016
Amigo su disertación recoge y contextualiza el momento que estamos viviendo y su posición de preveer el oportunismo, las viejas y nuevas patologías de organizaciones, movimientos y partidos hay que pensarlas para no caer en la desviación, Hay que dormir con un ojo abierto,
ResponderEliminarDe acuerdo amigo, gracias. Abrazo
EliminarAmigo su disertación recoge y contextualiza el momento que estamos viviendo y su posición de preveer el oportunismo, las viejas y nuevas patologías de organizaciones, movimientos y partidos hay que pensarlas para no caer en la desviación, Hay que dormir con un ojo abierto,
ResponderEliminarEstamos en la causa px el gobierno maneja los medios tiene todo a su favor ,nos brindan educación de mala calidad para que no tengamos principios y en medio de la duda llegan los medio y lo hacen ver todo facil cuando todo es una trampa. ESTE ES MI GRANO DE ARENA UNETENOS. HAY GOBIERNOS QUE SE VEN BENEFICIADOS CON EL PLESBICITO POR ESO LO APOYAN LOS INTERESES ECONOMICOS Q BRINDA NUESTRA GUERRA PARA EE UU SON GRANDES Y SI NO LO LOGRAN HOY VOLVERAN DESPUES COMO CON EL PAPA DE SANTOS LO INTENTO HACE DECADAS, ES UN DEBER DEFENDER LO NUESTRO.
ResponderEliminarNo solo E24 hay en el paìs muchos colectivos y personas que-desde una posiciòn de izquierda-quieren hacer una política distinta. Se trata de generar una alianza o Red de colectivos autònomos y personas pero no amarrarlos a ninguna burguesìa sino por una acciòn polìtica no electoralista, independiente, antiburocràtica.Y Nada de lo que hay nos representa ni Claudia Lòpez ni Fajardo ni nadie-SON NEOLIBERALES-Asì que el llamdo debe ser màs amplio por que sino se cae en el mismo sectarismo que se està criticando
ResponderEliminarHay que trabajar con un espíritu más amplio. Me dirijo a los jóvenes del MS-E24 porque los veo en una actitud unificadora, sin esquemas izquierdistas que son una traba mental para el momento. Hay que despejar el terreno y poco a poco avanzar. Saludos
Eliminar