EL PERDÓN ES UNA ARMA POLÍTICA DE ALTO CALIBRE
Popayán, 28 de
septiembre de 2016
Timochenko les pidió perdón a
todas las víctimas. Sin decirlo, eso incluye a Uribe. Y Uribe... ¡no sabe qué
hacer! Ese acto de grandeza descuadra la esencia de su discurso por el NO.
Ese mensaje (pedir perdón), por
sí solo, va a conseguir más votos por el SI que cualquier otra campaña del
gobierno o de la izquierda.
Lo que ocurre es que hay que
interiorizarlo y trabajarlo mucho más. Si pido perdón, yo debo perdonar.
¿Podemos perdonar a Uribe y al resto de la oligarquía y al imperio?
Yo creo que sí. Pero no es del
perdón cristiano del que hablo. Es un perdón mucho más elaborado. Significa
entender las causas del conflicto y comprender los intereses de las clases
sociales antagónicas.
El perdón es liberarnos del odio
para poder "ver más allá", o sea, conocer de verdad.
Si yo odio a la oligarquía y al
imperio es porque no los conozco. El odio nace del miedo a lo desconocido que
me hace daño. Odiar sólo me lleva al desgaste y a reaccionar con emoción y sin
cálculo. El odio es fácilmente manipulable.
Si yo perdono es porque he
logrado entender la naturaleza de mi antagonista. Eso me hace más consciente de
sus intereses, inclinaciones, fortalezas y debilidades. Y me prepara para
derrotarlo sin aniquilarlo. Vencerlo sin matarlo.
El imperio y la oligarquía son
criminales por naturaleza. Perdonarlos no significa olvidar su naturaleza. Por
el contrario, el perdón nos hace más conscientes porque al eliminar el odio, se
nos despeja la mente. Nos prepara para actuar mejor.
Si yo odio a mi contradictor o
antagonista es porque creo que es "malo", porque él así lo quiere y
entonces, creeré ingenuamente, que él puede cambiar. Y... bajaré la guardia.
Pero no, el imperio y la oligarquía son criminales por naturaleza y nunca van a
cambiar.
El perdón no es para cambiar la
naturaleza de nuestro contradictor de clase. El perdón es para desnudar ante la
sociedad la naturaleza criminal del imperio y la oligarquía.
El perdón es un valor moral de
alta calidad para ganarnos a las mayorías de la sociedad y derrotar
políticamente a ese contradictor.
Uribe - a pesar de sus graves
crímenes - es también una víctima del conflicto y, ha sido un instrumento del
gran capital. Si profundizamos en el valor político del perdón, vamos a poder
identificar ante nuestro pueblo - en verdad - quienes son nuestros más grandes
enemigos.
Sólo así podremos realmente
avanzar. Lo que hizo Timochenko el 26 de septiembre en Cartagena es sólo el
primer paso, seguro que de seguir por esa senda haremos cosas más increíbles.
¡Los jóvenes tienen la
palabra!... porque tienen más limpio el corazón.
La razón de nuestra existencia es conocer la diferencia entre bien y mal y luchar contra el mal.-
ResponderEliminarComo dice en el versículo de la Biblia: Porque nuestra lucha no es contra sangre y carne, SINO CONTRA PRINCIPADOS, CONTRA POTESTADES, CONTRA LOS PODERES DE ESTE MUNDO DE TINIEBLAS, contra las huestes espirituales de maldad en las regiones celestiales. Efesios 6-12-
El perdón es entre nosotros como humanos, como hermanos, reconociendo en el otro mi posibilidad de equivocarme y volver a comenzar.-
Por eso Timochenko les pidió perdón a todas las víctimas, a seres humanos.-
Pero el sistema capitalista, ¡no es mi hermano!, es contra el LA LUCHA, EL TRINFO FINAL.-
Como campesino que arranca la cizaña del cultivo, no la ama, no la odia, solo debe exterminarla.-
Este nuestro planeta es un paraíso, es una virtud = REGIONES CELESTIALES.-
Echado a perder por REINOS Y POTESTADES DE TINIEBLAS, O, HUESTES ESPRITUALES DE
MALDAD= CAPITALISMO.-
Anamaría.-
UNA VEZ UN ANCIANO INDIGENA ME COMENTO ALGO SOBRE EL PERDON QUE HE ACOGIDO COMO VERDAD.
ResponderEliminar" MIRE ME DIJO.. PERDONAR ES UN ACTO DE LIBERACIÓN. OBSERVE USTED CARGA UNA MOCHILA Y CADA QUE SE SIENTE OFENDIO HECHA A LA MOCHILA UNA PIEDRA....... Si usted le corta la base de la mochila, podra caminar sin el peso de las ofensas y sera librará del peso de las piedras"